Son muchos los que últimamente confían en el desguace como método para poner en marcha de nuevo un coche disfuncional. La cuestión no es baladí, porque implica que todo automóvil que no marcha se puede volver a reutilizar siempre que tengamos a nuestra disposición un modo de hacerlo claramente operativo.
Lo cierto es que esto nos lleva a pensar que en los momentos actuales la mejor manera de actuar es consiguiendo un poco de ahorro comprando las piezas a reemplazar en un desguace. O lo que es lo mismo, hemos de optar por el ahorro y la calidad como medio de resistir en plena crisis, porque de lo contrario nos podemos ver inmersos en problemas de distinta índole.